martes, 23 de junio de 2009

ESCENAS INOLVIDABLES: TIDELAND

"Tideland" es un film inclasificable, provoca sensaciones contrarias: admiración u odio. La escena que nos ocupa levantó ampollas y fue lo más criticado del conjunto. En "Tideland" Jeff Bridges es Noah, una estrella de rock en horas bajas con una adicción preocupante a la heroína, y es su propia hija de 9 años Jeliza-Rose (Jodelle Ferland) quien le prepara las dósis de caballo. El breve papel de Jeff Bridges - muere los 20 minutos de comenzar el film - deja sin embargo un rastro (hedor) duradero. Una escena inolvidable, para bien o para mal.

(Jeliza-Rose está preparando la jeringuilla con la que va a inyectarse su padre)
Noah: ¿No me estás bajando la dósis, verdad cariño?.
Jeliza-Rose: No, no te preocupes.
N: (Se enciende un cigarrillo) Ahora papá se irá de vacaciones.
J-R: No por mucho tiempo esta vez, papá.
N: No, serán unas cortas vacaciones. Papá solo se va por un tiempo al lugar donde se hacen los sueños. (Se aprieta una goma al brazo y da unos ligeros golpecitos para encontrar la vena). Listo.
J-R: (Le da la jeringuilla).
N: Gracias cariño. Papá va a ir a dar un paseo por la lejana orilla subterranea, donde se esparcen los sueños y esperanzas. (Se inyecta la dósis y le devuelve la jeringuilla a su hija) Sí, los veo... reliquias de tiempos antiguos, tumbas solitarias que se erigen por la melancolica tierra de las mareas. (Cae su brazo con el cigarro).
J-R: (Le sostiene el brazo, le quita el cigarro , lo apaga en el cenicero, observa a su padre inmerso en su particular "viaje" y suspira).

sábado, 20 de junio de 2009

ESCENAS INOLVIDABLES: K-PAX

Se trata de la última conversación que mantienen Kevin Spacey (Prot) y Jeff Bridges (Dr. Mark Powell) en el film, la escena de la despedida, que se desarrolla en el despacho del psiquiatra. Éste ha descubierto algo sobre el pasado de Prot y no sabe muy bien como contárselo.

(El Dr. Powell mira un anuario universitario cuando se da cuenta de que Prot ha entrado a su despacho).
Mark Powell: ¡Prot!, ¡ponte cómodo! (Le invita a sentarse). ¿Has hecho la maleta?, ¿estás listo?.
Prot: Totalmente, he visto la luz... Era broma, Mark. Los humanos no tenéis sentido del humor. (Se sienta).
M.P: Dudo que Freud hiciera algo así pero cuando alguién se va solemos despedirnos con un pequeño brindis. (Coge una botella y un par de vasos). ¿Te gusta el whisky o prefieres algo un poco menos fuerte?.
P: ¡No!, probaré el whisky.
M.P: (Sirviéndolo) Bueno, te deseo un buen viaje. (Le da un vaso y brinda con el suyo).
P: (Se lo bebe de un trago).
M.P: (Se ríe) A decir verdad K-Pax debe de ser un lugar maravilloso, ojala pudiera verlo. ¿Tendría alguna oportunidad?.
P: Antes deberías ver más cosas de tu mundo, en realidad deberías ver más a tu familia, invita a tu hijo por Navidad.
M.P: Es posible que lo haga, Prot.
P: ¿Sabes lo que he aprendido de la tierra?. Qué hay suficiente luz para llenar 50 planetas. Las plantas, los animales, los humanos, los hongos, los virus,... Todos se disputan su parte de espacio, se empujan unos a otros, se alimentan unos de otros, se relacionan.
M.P: ¿No tenéis esa clase de relación en K-Pax?.
P: Nadie la quiere ni la necesita, en K-Pax cuando yo me voy nadie me echa de menos ni hay motivo para hacerlo, sin embargo presiento que cuando me vaya me echaréis de menos.
M.P: (Asiente con la cabeza).
P: Sí, es una sensación extraña.
M.P: No tienes porque irte, Prot. Seguro que hay algún modo de convencerte para que te quedes como uno más.
P: (Sonrie) Te echaré de menos, Dr. Powell. (Se levanta). Oh, tengo que terminar mi informe, me da la sensación de que he perdido mi lápiz.
M.P: (Después de mirar absorto el anuario también se levanta). Toma la mía. (Le entrega su pluma).
P: (Manteniéndo la pluma en alto). El instrumento de escritura más eficaz. (Le estrecha la mano al Dr. Powell). Adiós, amigo mío. (Se dirige hacía la puerta).
M.P: ¡Prot!, quería enseñarte una foto. (Abre el anuario y le muestra la foto).
P: Este es Robert Porter.
M.P: Eres tú. Robert Porter y tú sois la misma persona.
P: Esto es completamente absurdo, ni siquiera soy humano.
M.P: Al menos podrías aceptar la posibilidad.
P: Aceptaré la posibilidad de que soy Robert Porter si tú aceptas la posibilidad de que soy de K-Pax. Y ahora, si me disculpas (Se pone sus gafas de sol), tengo que coger un rayo de lúz.
(Antes de salir por la puerta se detiene y se gira) Ah, Mark, ahora que has encontrado a Robert, por favor cuídalo bien.
M.P: (Se queda en silencio pensativo).

miércoles, 10 de junio de 2009

JEFF BRIDGES, ANTE UN VACÍO DRAMÁTICO

Jeff Bridges sabe hurgar en los rincones más dolorosos y encontrar también allí alguna voz cómica. Eso es, al menos, lo que encuentra el actor en "The door in the floor" ("Una mujer difícil"). El filme, que parte de la novela de John Irving que publicó Tusquets en España, se estrena hoy. "Lo primero que me atrajo del guión fue que estaba inspirado en un texto de John Irving, cuya obra admiro mucho. Junto a esto, la manera de combinar tragedia y comedia desde un punto de vista artístico que da a toda la historia y con la que me siento muy identificado", aseguraba el actor estadounidense en septiembre pasado, durante el Festival de Cine de San Sebastián, donde presentó el filme y donde recibió el Premio Donostia a toda una carrera.

"Una mujer difícil", dirigida por Tod Williams y protagonizada por Bridges y Kim Basinger, es la adaptación de una tercera parte de la novela de Irving. Tanto gustó al escritor estadounidense el guión realizado por Williams, que le vendió los derechos de la obra por un simbólico billete de dólar. El filme describe un verano decisivo en las vidas de un matrimonio formado por un escritor de libros infantiles (Bridges) y su bella mujer, Marion (Basinger). Roto por el peso de una gran tragedia, la muerte en accidente de dos hijos adolescentes, Ted Cole, el escritor, decide contratar a un joven ayudante, Eddie (John Foster), para que sirva de catalizador para reavivar su matrimonio. Nace entonces una intensa pasión amorosa y sexual entre su mujer y el joven.

LA OPINIÓN DE IRVING

John Irving se reservó el derecho a opinar sobre la adaptación y también sobre la elección de actores para interpretar esta dramática historia: "Conocí a Irving hace bastante tiempo en relación con un proyecto que todavía no se ha llevado a cabo, la realización de un guión sobre "Son of the circus" ("Hijo del circo") y por ello tuve varios encuentros con él", recuerda Jeff Bridges (Los Ángeles, Estados Unidos, 1949). "Es verdad que se involucró mucho en la adaptación de Door in the floor e incluso vino varias veces a visitar el set de rodaje y estuvo siempre disponible no sólo para el director, sino también para los actores. Aunque yo nunca llegué a tener una conversación directa sobre mi personaje con él. Llegué a mis propias conclusiones".

¿Y cuáles fueron esas conclusiones? "Este hombre tiene la habilidad de meter sus sentimientos en compartimentos distintos. No sé si es una habilidad consciente o es sólo su forma de ser. Hay muchos hombres que reciben lo que les da la vida de esta manera, esconden sus emociones en el sitio adecuado y siguen adelante. Al mismo tiempo, es una característica que le irrita consigo mismo. Él preferiría ser un poco más como su mujer y poder sentir el dolor más profundamente y no canalizarlo exclusivamente en sus dibujos, sus libros, su arte. Es un hombre que tiene dificultad para ponerse en contacto con sus sentimientos más profundos. Cuando él cuenta lo de la tragedia al hombre joven lo hace como si estuviera contando una historia ajena. Cada persona se enfrenta a una pérdida y cada una lo hace de manera diferente".

Hace diecisiete años, Jeff Bridges y Kim Basinger trabajaron juntos en Nadine. El reencuentro ha enfrentado a dos actores de métodos muy diferentes: "Kim entra en la película cuando dicen acción y sale de ella cuando dicen corten. A mí me gusta ensayar, charlar sobre mi personaje, charlar también con los otros actores, llegar a conocerles mejor como personas, porque creo que se puede llevar algo de esa familiaridad luego a la película. Kim y yo fuimos también un matrimonio en Nadine. Recuerdo que al principio estaba muy preocupado porque tenemos dos estilos muy diferentes de trabajar, de enfrentarnos a los papeles tan distintos que podía parecer que cada uno estaba actuando en una película diferente. Al final está demostrado que da buen resultado, que la magia se produce, de eso se trata. La experiencia fue muy positiva entonces y lo ha vuelto a ser ahora. Ella no ha cambiado su estilo y yo tampoco. Creo que esta vez, en "The door in the floor", ensayó un poco más de lo que haría normalmente como un favor hacia mí. Es una gran dama y una mujer estupenda".

Bridges ha utilizado para la película sus propios dibujos, los que salen en las ilustraciones de los libros de los niños. "Yo quería haber hecho todos los dibujos y estaba trabajando en ello, pero luego me di cuenta de que no podía hacerlo todo".

Fotógrafo, pintor, productor, músico e intérprete de películas ya inolvidables ("La última película", "Los fabulosos Baker Boys" o "El gran Lebowski"), espera todavía el día que dé el salto a la dirección. "Espero que algo de eso me llegue. Todavía no he encontrado una historia que me muerda para dirigir. No he sentido la necesidad imperiosa de hacerlo. Estoy abierto a ello, pero, de momento, la búsqueda es sólo pasiva".

Extraído de "El País" (Rocío García, 22/10/2004).

lunes, 1 de junio de 2009

LOS PARTICIPANTES DE "PABLO"


Numeros personalidades cinematográficas dieron su testimonio en el documental "Pablo":

Norman Jewison, Samantha Harper, Jon Voight, Norman Lear, Andy Garcia, Beau Bridges, Jeff Bridges, Don Calfa, George Segal, Anjelica Huston, Jonathan Demme, Robert Downey, Richard Benjamin y Haskell Wexler.

LA CÁLIDA VOZ DE JEFF BRIDGES

Jeff Bridges con Richard Goldgewicht y Jeremy Goldschneider (director y productor de “Pablo”)

El personaje de “El Nota” interpretado por Jeff Bridges en el film de los Hermanos Coen “El gran Lebowski” resultó ser un punto de referencia fortuito para nuestro personaje de Pablo en el guión cinematográfico de “Pablo”: ambos son personajes en sintonía con su tiempo y cómodos en cualquier parte que estén. Ambos sin hombres sencillos y miembros fervientes del Club de la Marihuana... Pablo es muy amigo de Jeff Bridges desde hace muchos años, y decidimos pedirle a Jeff que fuera el narrador de nuestro film. ¿Y adivina qué?.
Dijo que sí.
Cuando llegamos al estudio, Jeff se integró inmediatamente a la visión del film y prestó su toque cálido a la producción.

* Publicado en Pablo Ferro: Making the movie (23/11/2007).